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domingo, 14 de marzo de 2010

Periodismo del futuro, alcances


La vida moderna ha dejado de serlo vivimos el agitado postmodernismo digital, la era de la nanotecnología y de los cambios frenéticos y acelerados, que sin querer transforman nuestra vida diaria, ¿hacia dónde van? ¿Qué causarán?

A mi entender en los próximos diez años los medios online conseguirán cada vez más aceptación y credibilidad. Los derechos de autor o copyright van a evolucionar al igual que el resto de ramificaciones relacionadas al periodismo, en este caso el shareware será cada día más abierto para el público, muchos autores concederán por una ínfima suma sus obras vía web, para hacer conocer sus nombres de forma global. Debido a esto la legislación internacional va a tener variaciones para adoptar los nuevos formatos de información.

Los medios escritos pasarán a la plataforma de internet y aunque no se acabarán las ediciones impresas, serán parte de la minoría, de los museos, del pasado; ya que irán a una velocidad muy lenta en comparación con lo vertiginoso de las nuevas tecnologías, los usuarios ahora querrán actualizar su información más que a diario, además esto ahorrará tiempo, espacio, dinero y recursos naturales. Se reducirá la producción o el tiraje de muchos libros, revistas y periódicos, nuevos dispositivos irán desplazando las impresiones como viene sucediendo con los Kindle por ejemplo.

Hacer las compras en el supermercado será cosa del pasado, nos conectaremos cada vez más en la red y pasaremos menos tiempo en las tiendas, menos colas pero también menos interacción con nuestros semejantes, habrán más terapias de desarrollo de las capacidades sociales, más personas con depresión y estrés debido a estas carencias y a la rapidez con la que todo cambia y se desarrolla, poco tiempo para adecuarse a los cambios… el tiempo será nuestro bien más preciado.

La tecnología será tan común y accesible que el periodismo “casero” será pan de cada día; grabaciones, audios, fotografías todos estos de alta calidad se podrán estar al alcance de cualquier usuario de la web.
La historia será más exacta, dinámica y podremos ser parte de ella o voceros permanentes, los archivos de los diarios al convertirse en electrónicos podrán ser facilitados a miles de usuarios, nuevos recursos para nuevas generaciones, el poder de la información llegará al siguiente nivel.

La comunidad de usuarios podrá participar activamente como se viene haciendo desde hace unos pocos años, compartiendo noticias locales, fotos y videos de los acontecimientos que presencian; los medios comprarán información de usuarios que la posean, algunas profesiones perderán auge o evolucionarán dentro del marco de las comunicaciones por ejemplo seguirá existiendo la fotografía como profesión y arte pero básicamente un solo comunicador podrá dominar muchas tecnologías y también oficios como los de redactor, fotógrafo, editor de videos, programador de páginas web, etc.

Gracias a esto muchos periodistas podrán empezar con relativa facilidad en el mundo de las comunicaciones, con un capital mínimo, podrán publicar sus escritos, informar a cierto sector del público y demás actividades relacionadas.

El terrorismo virtual será una amenaza, los delitos contra la propiedad, suplantación de individuos, entre otros; se harán inminentemente presentes y alcanzarán notoriedad en un futuro cercano. El uso indiscriminado de los servicios gratuitos de video, blog, páginas web, etc. para condicionar comportamientos, influenciar en las creencias, política y cualquier otro tipo de tendencias será uno de los problemas más frecuentes ya que no podrá controlarse por completo los motivos de existencia de ciertos lugares en la web.

Será una tarea dura para el lector de los medios digitales, elegir o discernir entre un medio serio y uno sensacionalista, cada vez las publicaciones irán más de los general a lo particular según el interés de cada lector.

La dependencia de la tecnología ya no será parcial si no total y eso es un riesgo que sin querer tomaremos para ver donde nos conduce. Pronto grandes computadoras y bases de datos controlarán nuestras vidas, con un código de barras; criminales o personas naturales serán fiscalizadas por el sistema, sabrán nuestros horarios, tipos de sangre, salidas o entradas a tiendas, ciudades y países con un solo escaneo de un número de serie.

Por último el periodismo del futuro implicará mucha creatividad, para poder distinguirse, sacarle el jugo a las nuevas tecnologías y a todos los recursos que emergen a través de ellas. La hipertextualidad reinará, cada vez más etiquetas y enlaces serán encontrados en los contenidos de un artículo o nota en internet. Además de esto los responsables de las informaciones pueden saber en tiempo real la opinión de sus lectores virtuales, sus críticas y también podrá haber un dialogo equilibrado en el que se enriquezca el lenguaje y la plataforma de internet.


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